LAS 5 FEAS VERDADES DE NUESTRA INDUSTRIA
Un llamado urgente a desaprender, mirar hacia adentro y entrar al 2026 con propósito, valentía y claridad.
Lo que nadie quiere decir, pero todos necesitamos escuchar antes de cerrar el 2025.
¿Y entonces? Hoy nos miramos de verdad.
(Les hablo desde el corazón, porque 2026 nos exige desaprender)
Hoy, 1 de diciembre de 2025, decidí hacer lo que pocas veces hacemos en esta industria: mirarnos al espejo sin miedo.
Les hablo como hablo con mi equipo: con pasión pero sin apasionarme, con claridad y desde la honestidad que merece una industria que quiere crecer.
Porque nuestro propósito es vivir felices de nuestra vocación, no sobrevivirla. Y para eso, tenemos que aceptar estas cinco verdades incómodas.
1. Estamos quemando talento… y lo estamos perdiendo.
Vemos agotamiento, plazas congeladas y roles reemplazados por talento fuera de PR. No porque sean mejores, sino porque aquí estamos trabajando desde el cansancio, no el propósito.
Si seguimos así, perdemos lo más valioso: nuestra gente. ¿Y entonces?
2. Operamos con procesos que ya no funcionan.
Aprobaciones eternas. Reuniones innecesarias. Workflows lentos. Silos que existen por inercia.
La tecnología y el mercado van en sprint… y muchos seguimos en cámara lenta.
No se puede competir en 2026 con procesos del 2015. ¿Y entonces?
3. Nos cuesta adaptarnos. Más de lo que admitimos.
Hablamos de innovación, pero la adoptamos tarde. Queremos agilidad, pero operamos rígido.
La verdad es simple: el mundo no va demasiado rápido… nosotros vamos demasiado lento. ¿Y entonces?
4. Somos más reactivos que proactivos.
Sabemos responder, pero anticipar aún no es la norma. Esperamos briefs, cambios, urgencias. Pero 2026 premiará al que se adelanta, no al que reacciona. ¿Y entonces?
5. Seguimos trabajando divididos.
El consumidor vive todo integrado, pero nosotros no. Departamentos, disciplinas y egos siguen creando distancia.
Y sin integración, no hay impacto real. ¿Y entonces?
¿Por qué decir esto hoy?
Porque diciembre es para vernos de verdad. Para reconocer que estas verdades no son ataques, sino oportunidades.
Para trabajar con pasión pero sin apasionarnos, y recordar que nuestro propósito es vivir felices de nuestra vocación.
Si entramos al 2026 haciendo lo mismo, no estamos planificando: estamos retrocediendo.
Mi llamado:
Desaprendamos lo que ya no sirve. Cuestionemos lo que dimos por hecho. Abracemos lo que el presente exige. Evolucionemos sin excusas.
2026 no va a esperar por nadie. ¿Y entonces?
- Rubén J. Rodríguez CEO, P2P Group
